sábado, 10 de enero de 2015
PESO
Qué es lo que guardas, qué escondes?
Qué llevas en tu interior que te impide avanzar.
Todos nos anclamos a un pasado.
Todos atesoramos recuerdos.
Pero la vida es soltar.
La vida te permite dar,
para así poder recibir.
Pues sino te liberas de todo tu peso,
cómo amor vas a caminar?
Arrastrarse no es la vía.
Perder las fuerzas no es razón.
La vida es ligereza, frescura y alegría,
experiencias ya vividas.
Libérate de todo aquello que escondes.
Abrete y déjalo ir.
Así tus vestiduras no te pesarán,
así la vida te honrará.
Siempre un vacío,
siempre un vacío para ser llenado.
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"¿Qué es lo que guardas? ¿Qué escondes?/ Siempre un vacío para ser llenado".
ResponderEliminarPropio y/o ajeno, todo vacío que sea llenado añadirá abundancia allí donde antes sólo había carestía. La carestía no mola. Reconocerla es siempre el primer y obligado paso para atinar a trocarla en abundancia, a salvo de autoengaños. Pero... ¿cómo reconocer el vacío?
Eso es así. Pero esta vez lo que sentí al escribir esas palabras, es que hay que soltar continuamente y llenarse continuamente. Se trata de un vacío de oportunidad y experiencia, no de escasez. El tiempo se acelera y todo cambia. La capacidad de adaptación es importante en estos momentos de transición.
ResponderEliminarLibérate cada día, vive el instante y llénate con él. Eterna abundancia.
La capacidad de aceptación, el llenarse y vaciarse continuamente, tiene doble filo. Si compete estrictamente a uno, te puedes cortar tú, o afilar una óptima herramienta que te ayude a construir. Si compete a dos o más personas, ojo. Podemos tajar al otro y desangrar sus realidades. Las herramientas quedan entonces romas y olvidadas, y la construcción abandonada a la maleza.
ResponderEliminarEntonces afila una óptima herramienta que te ayude a construir. Cada cual la suya... El camino es el de uno mismo aunque se avance en compañía. Si eres fiel a ti mismo, no tajas al otro. Esa será su percepción.
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